viernes, 28 de septiembre de 2012

¿DÓNDE VAMOS A PARAR EN ESTA ESPIRAL DE VIOLENCIA QUE SE RECRUDECE DÍA TRAS DÍA?


¿DÓNDE VAMOS A PARAR EN ESTA ESPIRAL DE VIOLENCIA QUE SE RECRUDECE DÍA TRAS DÍA?
 Zenair Brito Caballero 
(britozenair@gmail.com)

La inhumana secuela de violencia y muerte que estamos padeciendo los venezolanos como resultado de la ofensiva verborreíca sin pies ni cabeza del  candidato-presidente contra el candidato de la oposición, ha provocado que al final de su Gobierno el mandatario parezca haberse borrado de la atención ciudadana.

A pesar de que en esta etapa final de su gobierno, vemos día con día agravarse la feroz embestida de la violencia y de la delincuencia, que han empezado a mostrar su filón fanático, la atención de la gran población ha sido acaparada por las elecciones presidenciales y sobre todo, por la sucesión presidencial que se decidirá el próximo domingo 7 de octubre.

No obstante la violencia cruel, que no deja de sorprendernos, como ocurrió hace unas semanas, con el enfrentamiento entre agentes de seguridad y marchistas de las protestas opositoras, el verdadero meollo del problema nacional, es el económico, que a pesar de la presunción del Gobierno por destacar sus cifras sanas en lo macroeconómico, este beneficio sigue sin llegar a los bolsillos de las familias venezolanas en extrema pobreza.

La persistencia del comandante de defender el esquema  de su llamado socialismo-comunismo a la cubana, cuando las principales potencias del mundo han reconocido las fallas de este modelo, nos han dejado inermes y vulnerables ante el menor tambaleo de la economía mundial.
El temido anuncio de una nueva etapa recesiva en el crecimiento de Estados Unidos, más la crisis europea con el tambaleo del euro, amenazan con revertir nuestra incipiente recuperación, enfrentándonos en plena transición gubernamental, después de las próximas elecciones, a una crisis social de gran calado.

La devastadora realidad nacional que hoy por hoy conjuga: mayor pobreza, mayor desigualdad, mayor violencia, mayor infiltración institucional por parte de la delincuencia y, consecuentemente, mayor impunidad, deja al próximo presidente de Venezuela, muy probablemente el permanente puntero Henrique Capriles Radonski, ante un escenario muy complejo y difícil de recomponer.

La violencia criminal se ha extendido y cobrado intensidad en prácticamente todas las regiones del país, teniendo como víctimas, ya no sólo a los integrantes de bandas en conflicto, sino a jefes policiacos, candidatos a puestos de elección popular, periodistas, además, los cientos de miles de civiles inocentes que han perdido la vida en el fuego cruzado entre las fuerzas del orden y los delincuentes.

¿Adónde, vamos a parar, en esta espiral de violencia incontenible que se recrudece día tras día? El temor y la desconfianza que embargan a la población, sin duda, mucho han motivado el vuelco ciudadano ante las elecciones. Lo que sea con tal de darle ya la vuelta a la página.
Por eso nadie repara en el comandante, ni le recrimina sus decisiones erráticas que han dejado más de 50 mil muertos como saldo. Más víctimas que las que dejó la guerra de Vietnam a los norteamericanos, a lo largo de.......años!! Por ello nos preguntamos si los responsables de este caos habrán de enfrentar un juicio por todo lo que han desatado.

Porque no se trata nada más de la cruel beligerancia, sin pies ni cabeza, que el comandante ha desatado, sino que el mandatario no ha dicho palabra sobre combatir a la corrupción, que hoy permite que el dinero y la influencia sean la divisa de cambio para la obtención de privilegios por fuera de la ley, ni tampoco ha reconocido que, justamente, por la incapacidad del Estado Venezolano para sancionar a quienes infringen la ley, aparece la impunidad, el mayor incentivo para seguir delinquiendo.

Afortunadamente para la Nación, los tiempos de cambio se avecinan. El momento de complejidad y riesgo que amenazan la viabilidad del país, requiere con urgencia de la participación y el compromiso de venezolanos sólidamente formados e informados, experimentados, responsables y capaces de asumir el enorme reto de rescatar a Venezuela de una criminalidad impune que la tiene secuestrada. El voto ciudadano razonado el próximo domingo 7 de octubre por Henrique Capriles Radonski, lo hará posible si todos los venezolanos sufragamos por el CAMINO DEL PROGRESO.